Por Juan Carlos Fernández | Gerente Corporativo de Impuestos de Grupo SID
Las finanzas personales se refieren a la buena administración del dinero. Implica llevar control de los ingresos que recibo y cómo se invierte y se gasta, teniendo en consideración siempre la importancia del ahorro. Tener unas buenas finanzas personales nos proporcionan seguridad y libertad en nuestra vida diaria, lo cual se traduce en bienestar financiero.
Pasos para mejorar nuestras finanzas
- Determine su nivel de ingresos y egresos: Te hará más consciente de cómo manejas el efectivo y en qué estás gastando. Un presupuesto simple aporta mucha claridad.
- Establezca sus metas financieras: Con un debido control de tus gastos, estarás en capacidad de establecer tus metas de ahorro y proyectos futuros, desarrollando un plan y monitoreando tus avances.
- Mi capacidad de financiamiento es igual a mis ingresos menos mis gastos: Es importante para ello elaborar un presupuesto que incluya los gastos básicos, en orden de importancia: alimentos, medicinas, renta, educación, transporte, entre otras deudas fijas, así como imprevistos que puedan surgir. El presupuesto debe ser flexible para adaptarse a las circunstancias, y lo suficientemente exigente para motivarnos a crear el buen hábito del ahorro.
- Reduzca las compras innecesarias: Los gastos innecesarios abundan. Analizar nuestros gastos nos permite disminuir o eliminar aquellos que no agregan ningún valor.
- Ten control de las deudas: El mal uso y la falta de control en los gastos provocan grandes deudas que pueden sobrepasar tu capacidad de endeudamiento. Si bien el crédito es importante, debes tomar en cuenta tus límites de crédito y el tipo de interés del financiamiento. Cuidado que no te alcance “el lado oscuro del crédito”, por tomar decisiones equivocadas de opciones de préstamos con usureros o prestamistas de la calle, con pagos de interés fijo; o el caso de manejar varias tarjetas de crédito, cometiendo el error de financiarte con ellas. Estas malas decisiones, pueden llevarte a un círculo vicioso de consecuencias graves.
- Asegúrese donde invierte su dinero: Analice a donde va su dinero, es punto de importancia. Busque asesoría y asegure la rentabilidad. Invierta en entidades reconocidas y de experiencia.
- Educación financiera: El educarnos para controlar las compras emocionales por impulso y el gastar de más, nos trae beneficios en nuestra economía, un mayor bienestar que se traduce en tranquilidad, salud mental y calidad de vida para nuestras familias.
- Cultivar un buen hábito del ahorro: Ahorrar nos permite crear un capital propio, recibir ingresos por ese dinero y prepararnos para el futuro. Con una planificación adecuada, el ahorro te permite alcanzar metas de corto, mediano y largo plazo. También, facilita estar preparados económicamente ante cualquier situación de emergencia.